Dónde Poner la Lejía en la Lavadora: Evita Desastres en tu Colada

Llevo reparando lavadoras más de una década y he visto auténticos desastres causados por la lejía mal usada: desde ropa agujereada hasta gomas de escotilla que se deshacen como chicle. La lejía es un químico potente, y aunque es maravillosa para blanquear y desinfectar, hay que tratarla con respeto.

Una de las dudas más frecuentes que me preguntan los clientes en LaColada es: "Oye, ¿dónde se echa la lejía exactamente? ¿En el del suavizante vale?". La respuesta corta es NO. La respuesta larga, la que salvará tu ropa y tu lavadora, te la explico a continuación con todo detalle de técnico.

El Mapa del Tesoro: Identificando el Cajetín

Antes de verter nada, abre el cajetín de tu lavadora. Normalmente verás tres o cuatro huecos. Cada uno tiene una misión y un momento de entrada en el ciclo de lavado.

1. El Compartimento del Triángulo (△) o "CL"

Si tu lavadora es moderna o de gama media-alta, es probable que tenga un compartimento específico para la lejía. Busca un símbolo de un triángulo o las letras CL (de Cloro). Suele ser un hueco pequeño, a veces con una tapita o una pieza de plástico extraíble.

¿Qué hacer? Si lo tienes, ¡úsalo! Vierte la lejía ahí hasta la marca de "MAX". La máquina se encargará de diluirla y soltarla en el momento exacto (normalmente en el primer aclarado o al final del lavado principal) para que no dañe la ropa.

2. El Compartimento II (Lavado Principal)

Es el hueco más grande, donde pones el detergente habitualmente. Si tu lavadora NO tiene compartimento de triángulo, este es tu plan B.

¿Cómo hacerlo? Nunca eches la lejía pura. Mézclala con el detergente líquido o, mejor aún, dilúyela en un vaso de agua antes de echarla en este cajetín. Así entrará en el tambor ya mezclada y no quemará la primera prenda que toque.

3. El Compartimento de la Flor (Suavizante)

Este es el ZONA PROHIBIDA para la lejía. El suavizante se libera en el último aclarado y se queda en la ropa (no se enjuaga más). Si pones lejía aquí, te la estarás poniendo en la piel al vestirte, además de que el olor a cloro será insoportable y amarilleará la ropa al secarse al sol.

¿Puedo echarla directamente en el tambor?

Como técnico, te digo: poder, puedes, pero es como jugar a la ruleta rusa con tu ropa.

Si viertes lejía pura sobre una montaña de ropa seca, las prendas que reciban el chorro directo sufrirán una quemadura química inmediata. En ropa de color, saldrá una mancha naranja/blanca irreversible. En ropa blanca, se debilitará el tejido hasta romperse en un par de lavados.

Si no tienes más remedio:

1. Pon la lavadora en marcha sin ropa y espera a que cargue agua.
2. Abre el cajetín y echa la lejía diluida por el compartimento II para que se mezcle con el agua del tambor.
3. O bien, diluye la lejía en un cubo de agua y échalo dentro del tambor ANTES de meter la ropa.

Errores Comunes que Veo en el Taller

• Mezclar lejía y amoniaco: Nunca, bajo ningún concepto. Produce gases tóxicos (cloraminas) que pueden dañar tus pulmones gravemente.
• Usar lejía en cada lavado: La lejía es corrosiva. Usarla a diario daña las gomas de la lavadora, provocando fugas de agua a largo plazo. Resérvala para ropa muy sucia o blanca que necesite desinfección.
• Lejía en ropa con elásticos: La lejía "come" el elastano. Si lavas ropa interior o calcetines con lejía habitualmente, las gomas se darán de sí y se romperán enseguida.

La Alternativa Profesional: Oxígeno Activo

En LaColada Lavandería Autoservicio Ponferrada, utilizamos sistemas de dosificación automática con oxígeno activo en lugar de lejía tradicional para la mayoría de lavados. ¿Por qué?

• Desinfecta igual de bien.
• No daña los colores (sirve para ropa de color).
• No estropea las fibras ni las gomas de la lavadora.
• Es más ecológico.

Si quieres saber más sobre esta alternativa, te recomiendo leer nuestro artículo sobre oxígeno activo vs lejía.